Reloj de sol de la Plaza principal de Ejea.
Plaza España. La más reciente
Un reloj de sol preside esta Plaza de España de Ejea de los Caballeros desde 1859. La plaza que ha tenido otros nombres, antes y después de realizar este reloj en una de las principales fachadas de la Plaza y junto al edificio que albergó al Ayuntamiento ejeano y que tuvo hasta su propia cárcel.
La plaza, ha sido siempre el centro de unión de sus gentes y donde estas, han celebrado la mayoría de actos importantes y festejos, siendo incluso la plaza de toros hasta bien avanzado el siglo XIX. Por lo tanto, por esta plaza habrán aparecido muy diversas gentes y que a partir de los años 80 de este siglo, con la llegada a nuestras tierras, de muy diferente razas de todas latitudes, estoy seguro que por ella, un árabe habrá lucido su turbante. Pero, lo que no creo posible, es que el año 1859 , fuera un musulmán suficientemente destacado en nuestra villa el que cediera su figura para insertarla en el reloj y manteniendo, desde su boca, la flecha que marca las horas.
Otras serán las razones por las que el árabe, nos marca las horas solares en la principal Plaza de Ejea de los Caballeros con sus números romanos.
Adjunto fotos de la misma Plaza, en diferentes épocas, de la colección de Carlos Calavia, donde en una de ellas, como en la actual, aparece el viejo Reloj de Sol con el citado personaje del turbante.
El gnomon del Reloj en la boca del árabe
3 comentarios
Buen trabajo para Asunción Gil. Buscar en l859 la colocación e inauguración del reloj en la Plaza, para ver si pone alguna referencia sobre el personaje.
Por otro lado, es lamentable no poder utilizar la plaza, para aparcar unos minutos de carga y descarga.
Tiene Miguel toda la razón, se han empeñao en hacer todo el casco antiguo para peatones y dejarlo a media luz, que no dan ganas de pasar por el. Cierran bares, tiendas y farmacias y solo va a quedar el reloj.
En todos los pueblos la plaza de España es la zona principal, donde sobre todo, cuando se celebra alguna fiesta es alli donde se celebra. Aquí pasa lo contrario.Tan apenas hay acontecimientos, pobre de luz, por la noche dan pocas ganas de pasar por allí y prácticamente no hay comercios ni sitios de interés que visitar.»como no sea el reloj»