La Misa Solemne va a celebrarse en la explanada del Templo. Los miembros de la Junta Directiva de La Cofradía, están desde muy temprano preparando todo para la Fiesta. Todo se llenará a rebosar a partir de las 10; pero a las 8 ya está con su propia silla Antonio Laborda en un lugar privilegiado, para presenciar el acto, -guarda sitio para cuando lleguen los de la radio para su transmisión-.
La mañana está espléndida, después de la corta lluvia de la madrugada y yo, contemplando la ornamentación de la plaza, recuerdo cuando en 1984, por decisión del Ayuntamiento, el arquitecto Daniel Olano, transformó en «Teatro de la Villa» los antiguos talleres del Institulo Laboral; se construyó el graderío en lo que era una ladera arcillosa y de la polémica que surgió, cuando se diseñó, e incluso se realizaron, cuatro altos postes metálicos que podían estar dotados de iluminación y megafonías, ser adornados de guirnaldas, como ahora, poder sustentar un escenario y estarían colocados para las Fiestas y actos concretos, en los huecos construidos casi en el mismo lugar que ahora se colocan lo que sustituye a los antiguos «Mayos».
Posiblemente alguien no veía con buenos ojos aquellas gradas con aires de anfiteatro, pensar en escenarios y tener el teatro junto a la Iglesia, tampoco, porque no se esperaba que la Fiesta de la Patrona, la Virgen de la Oliva, podía celebrarse desde un estrado en la plaza, y la Misa baturra podía a sustituir al Canto Gregoriano.
Los tiempos, las personas y las cosas cambian. Lo importante, para mi, será mantener viva la devoción y la fe.
Dejo constancia de lo bonita que está la plaza y siga la Fiesta.
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