Actualmente, la radio, TV, prensa escrita y los Blogs a través de internet, notifican a cada paso lo que acaece en cualquier lugar; pero datos concretos de lo sucedido en nuestros pueblos de Cinco Villas, en momentos concretos de tiempos pasados, no es fácil encontrar.
Por ello, hace un tiempo, insertaba en mi blog algunas fotografías antiguas, procedentes de una de las crónicas de un sacerdote, que desde Ejea, enviaba al Arzobispado. Hoy traigo aquí parte de aquellos textos, que nos muestran, bien a las claras, el interés de aquel párroco por dar a conocer aquellas circunstancias especiales, que ocurrían en nuestros pueblos.
Su nombre, Mosén Miguel Borraz Calafell y desconozco su procedencia; solo puedo concretar, que por el Exmo. Arzobispo de Zaragoza, Dr. D. Juan Soldevilla y Romero, fue nombrado con 44 años, Párroco de Ejea y responsable de su Arciprestazgo en Abril de 1906, cuando a éste pertenecían las parroquias de Castejón de Valdejasa, Erla y Paules, Sierra de Luna, Las Pedrosas, Luna y Junez, Lacorvilla, Pradilla, Remolinos, Rivas, Tauste y Valpalmas. Falleció en esta misma villa de Ejea, donde está enterrado, el 26 de Junio de 1935 a los 73 años.
De la mencionada Crónica, donde notifica el estado de salud de algunos de sus párrocos, como el de Sierra de Luna, D. Celestino Binaburo, que la tiene «un tanto quebrantada», del de Luna, «restablecido de la enfermedad que puso su vida en alarmante peligro», del de Pradilla… y de las obras realizadas en algunas iglesias, creo oportuno rescatar lo escrito con su propia pluma, sobre la situación de las cosechas, que es lo que más les preocupaba a las gentes de nuestros pueblos:
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Hasta aquí, extracto de la reseña de Mosén Miguel Borraz Calafell, desde Ejea de los Caballeros, 1913.